Mayo 2020 a la Virgen de la cueva Santa del Cabriel

El segundo domingo de mayo, los de Fuenterrobles vamos en romería a la Virgen de la cueva Santa del Cabriel en Mira (Cuenca). En el interior de la cueva cantamos el mayo viejo y posteriormente , por la tarde, después de la comida, en la era del caserío del  Alabud, el mayo nuevo que desde el año 2000 vengo escribiendo ininterrumpidamente  todas las primaveras.

Hogaño, por causa de la bicha no podemos hacer la romería, pero el mayo del año 2020 está escrito y os lo dejo por si desde los balcones queréis cantarlo o recitarlo.

NOTA: Para saber más de esta romería se puede leer el libro de Fernando Moya Muñoz, cronista oficial de Fuenterrobles, "La romería a la Virgen de la Cueva Santa del Cabriel" editado por el ayuntamiento de Fuenterrobles en el año 1998.

Los mayos de la Cueva que escribió Miguel López desde 1945 hasta 1999 se pueden leer en "Los mayos en el campo de Requena y Utiel y otras comarcas valencianas"  de Fermín Pardo y Mª Teresa Oller. Edit. Centro Estudios Requenenses Requenenses.1997

Los mayos que desde el año 2000 vengo escribiendo están recogidos en la primera selección de poesías fuenterrobleñas "Al pie de la sierra de la Avicuerca" Franciasco Arroyo Martínez 2001.


MAYO A LA VIRGEN DE LA CUEVA SANTA DEL CABRIEL
AÑO 2020. 


Ya llegamos a la Cueva,
jardín de luz y blancura
que nos espera la Virgen,
ramo de amor y dulzura.

De romeros y tomillos
eres la pura fragancia
de este barranco profundo,
Virgen de la cueva Santa.

A vuestras plantas, Señora,
mayo te ofrece sus flores,
que son ofrendas sinceras
de los buenos labradores.

La tierra fuenterrobleña
de majuelos y barbechos
lleva tu estampa querida
en lo más hondo del pecho.

Y ahora con el respeto 
que la ocasión se merece
pasamos a recordarte
las peticiones de siempre.

Los labradores del trigo
se amparan bajo tu manto
y solicitan humildes
rociadas a los campos.

Los labradores de viñas
imploran en la impotencia
que por la falta de lluvia
grandes bobales se secan.

Nos quedamos sin espigas
en las pardas sementeras,
sin los panes candeales
que salen de las artesas.

Nos quedamos sin racimos
en las rojizas laderas,
sin la fragancia del mosto
que alimenta las haciendas.

Virgen Santa de la Cueva,
lo estamos pasando mal,
libranos de las coronas, 
virus de grande maldad.

Con lágrimas en los ojos
te damos la despedida,
volveremos otro años,
es la promesa cumplida.

Romería a la Cueva Santa del Cabriel. Año 1973