viernes, 15 de mayo de 2020

El ganado mular, sus padres y la coz a una niña

Del ganado mular y sus padres

Aunque el ganado mular y asnal ha sido vilipendiado desde tiempos antiguos, los labradores, en cambio, lo han apreciado en gran medida.
        El ganado mular no enferma con tanta frecuencia como el caballar y además es más inteligente. Sin embargo, tiene fama de tozudo, obstinado, testarudo y terco pero ha heredado de los asnos su gran listeza. En resumen, muestra una excelente utilidad para la agricultura y el transporte, bien en la arriería como con carretas.
Otra prueba del gran aprecio la encontramos en el precio del ganado de trabajo durante el verano de 1942 que recogió don Rafael Janini:
Caballos: De 8.000 a 10.000 pesetas.
Yeguas: de 8.000 a 14.000 pesetas.
Potros: de 3.500 a 5.000 pesetas.
Mulas: de 6.000 a 15.000 pesetas.
        Muletos: de 9.000 pesetas para arriba.

        El semental asnal se llama garañón y de su unión con una yegua engendra un mulo o mula yeguatos. De la unión del caballo y burra se engendran mulos o mulas romos, también llamados burdéganos que son más rústicos y especiales para el tiro pesado.
        Los garañones con más y mejor reputación son los catalanes que se crían sobre todo en la comarca de Vich. También son excelentes los garañones de la comarca de Benavente (Zamora), los de la comarca de Valencia de Don Juan (León) y los manchegos de Albacete.
        Recogidas numerosa opiniones de los labradores fuenterrobleños, cada cual expresa las excelencias de los animales que ha tenido. Podemos decir, en líneas generales, y, a tenor de lo que nos han contado nuestros informantes que el ganado romo es de menor alzada que el yeguaro y muy apreciado para el tiro y arrastre pesado. Eran muy buscados para sacar madera del río Cabriel en Pajazo. En cambio, para el tiro ligero y labores de labranza estimaban las mulas yeguatas de Albacete.
        Las mulas yeguatas ´más reputadas que alcanzaban mayor precio eran las catalanas recriads en la Huerta de Valencia. Un importante centro de recrío se localizaba en Torrente y los tratantes de aquella localidad viajaban muy a menudo con sus animales a esta comarca.
        Dado que en el campo fuenterrobleño se alternaba la labranza con el acarreo de la mies y la uva, eran más estimadas la mulas catalanas que las manchegas que tan bien labraban.
        El veterinario D. Miguel A. Vilarrasa escribía al señor Janini: “La mula de la Plana de Vich, hija de yeguas bretonas, percheronas y bretana-percherona y garañón catalán, es reputada como la mejor mula que se produce en España, por su esbeltez,sobriedad, resistencia y adaptables a todos climas y países y muy dura para el trabajo” (Janini, 1944: 33).



Pacote con la blanquita. Circa 1945



La coz a una niña

Hasta 1965, cuando empieza la mecanización del campo, se cultivaba con más de 225 animales de labor. Los mayores no se cansaban de repetir que por detrás de las mulas y los machos no se debía pasar. Era grande la insistencia en esta recomendación. Hoy sabemos el porqué, ya que hacía unos treinta años que una mula nerviosa provocó graves heridas a una niña que correteaba por la calle. Lo hemos leído en varios periódicos de la época.

La Correspondencia de Valencia, 1º de abril de 1929

Procedente se Fuenterrobles ha ingresado esta madrugada en el Hospital la niña de ocho años María Flores Carrión, la que por haber recibido una coz, presentaba una herida contusa con fractura y hundimiento frontal. pronóstico grave.

Las provincias, 2 de abril de 1929

En el Hospital ingresó en la madrugada de ayer una niña de ocho años, vecina de Fuenterrobles a consecuencia de haberle propinado una caballería una coz, presentaba herida contusa con fractura y hundimiento frontal. 
Fue atendida en primera intención  por el médico titular de la expresada localidad don José Benet, y trasladada por sus padres al citado establecimiento benéfico donde se calificó su estado de pronóstico grave.

Las provincias, 4 de abril de 1929

Desgracia.
En el poblado de Fuenterrobles, el vecino Gregorio Moya Chaves llevaba del ronzal una caballería, cuando unos niños pasaron correteando, siendo alcanzada la niña de ocho años María Flores Carrión por una coz del animal que le produjo una herida en la región frontal de pronóstico reservado.

Desconocemos si la niña María pudo recuperarse de la grave herida que le produjo la coz de la mula.


Yunta de mulas en Fuenterrobles. 1905







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